Buen tiempo de mi juventud se lo dediqué a la historieta de Quino. Mafalda y sus amigos. Cuántas risas nos ha dado. Como todo aquello que rodeó mi infancia y juventud fue desapareciendo, y a veces te invade la nostalgia.
Porque crecí en el tiempo del "botellero", que recorrían las calles de mi Montevideo natal, con su cantito típico: "Botellerooooo, botellas viejas, camas viejas, compro se va el botelleroooo". En los tiempos del manicero. En el tiempo en que en la playa, se vendía café,sorocabana. "Café calentito el café, Sorocabana café".
Quién iba a decir que años después, durante mi adolecencia, y temprana juventud, el Sorocabana Café, iba a ser uno de los lugares que mas frecuentaba. Entre tanta cosa que se discutía, se comentaban, Mafalda siempre estuvo presente. Por lo tanto, hoy, leyendo en un diario mexicano,me sorprendió un artículo donde se publicaba una entrevista con Quino.
Hacía mucho que no leía nada sobre él. No es de asombrarse cuando se vive en un país nordico, difícil de encontrar mucha literatura.
La cosa era diferente 20 años atrás. Quizás en algún rincón de una biblioteca sueca queden aún ediciones de Mafalda, que sigue siendo tan actual como entonces, porque mucho no ha cambiado. Quiero compartir esta entrevista con alguién que como yo leyó a Mafalda.
MEXICO (AP) - La denuncia social que forma parte integral de su trabajo es cada vez más difícil para Joaquín Salvador Lavado, mejor conocido como Quino.
Esto se debe a que el creador del legendario y crítico personaje de Mafalda asegura que el mundo se está volviendo más aburrido y hay menos libertad de expresión y tolerancia hacia los caricaturistas.
"Siempre he pretendido ser elemento de denuncia de temas que me molestaban mucho, pero si ahora Estados Unidos admite que tortura gente y no pasa nada, ¿qué va uno a denunciar?. Uno se ha quedado con la temática colgando en el aire", se quejó el dibujante en una entrevista con el diario Reforma.
"El mundo está poco divertido. Esto de la globalización es un aburrimiento", señaló el artista quien asegura que la humanidad se dirige a un periodo de oscurantismo.
Su visión de la actualidad ha provocado que su humor se vuelva un poco más "ácido".
"Cuando uno era joven se acababa una guerra, creía que era la última y no aparecería otra; y a esta edad todavía no se acaba una y empieza otra. Eso lo va poniendo a uno muy pesimista sobre el ser humano", destacó.
Quino abandonó Argentina durante la época de la dictadura militar por razones de seguridad, pero entiende que después del 11 de septiembre "se ha puesto mucho peor la falta de libertad porque además ahora se ha sumado el mundo islámico que no le gustan las bromas sobre sus creencias" y recordó las amenazas de muerte a un caricaturista y el editor de un periódico danés donde se que publicó un dibujo del profeta Mahoma con el cuerpo de un perro.
"Ahora hay que trabajar tratando de no herir suceptibilidades", acotó.
El argentino de 75 años acaba de publicar un nuevo libro titulado "La aventura de comer" en donde mezcla política y gastronomía.
"Siempre en mis libros incluyo una página con un tema de restaurantes porque me parece un tema donde se da un juego político. Los pueblos quieren comer y cuando uno va al restaurante también. Los pueblos dependen de que sus gobiernos les den o no de comer o de sus capitalismos y uno depende también del camarero. Y al final todos tenemos que pagar", expresó.
Sobre la nueva presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, dijo que era muy temprano para determinar si será un "caldo más fácil de digerir".
"Por ahora le estamos sintiendo el perfume a la comida, vamos a ver qué gusto tiene", expresó Quino. 2007/12/13
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